POR TIERRA DE CAMPOS
Este fin de semana hemos estado en Palencia, en un pueblo llamado Villarramiel (cerca de la laguna de la Nava) observando las aves de la zona. En esta entrada os contaré la experiencia de Tierra de Campos. Lo más abundante era el cernícalo primilla (Falco naumanni), que volaba por encima de los campos planeando. Habría más de 20 posados en casitas para pájaros y otros 10 volaban por los alrededores. Los milanos reales (Milvus milvus) cada vez son más escasos por allí, porque son invernantes (muy pocos se reproducen) en toda la zona de Palencia y entonces con la llegada del verano son menos los que hay por allí, pero todavía se ven unos cuantos. Aguiluchos cenizos (Circus pygargus) había varios, sobrevolando los campos de cultivo. La mayoría eran hembras (no sé por qué) y en cuanto a los machos eran pocos los que volaban, sólo se veían posados en postes o en zonas que no halla cereal. Las avutardas al principio no se veían desde la carretera, pero cuando cogimos un camino de tierra para los agricultores de la zona cambió la cosa. De repente salieron séis de la bajada de una cuesta. Nosotros la íbamos subiendo, hasta que llegamos a la cima de la rampa y desde allí tuvimos una muy buena prespectiva del lugar. Y claro, mientras nosotros estábamos en la cima mirando el paisaje, al final de la rampa había un grupo de 6-5 avutardas que durante unos segundos no nos vieron, pero cuando terminaron esos segundos nos vieron y salieron volando justo en la dirección hacia la que iba el camino. Nos acercamos a ellas y por suerte no nos consiguieron ver. Justo al otro lado de la ventanilla del coche había una hembra de avutarda a menos de 40 metros, que no se fue y por el lado en el que estábamos el grupo de antes comía pacíficamente entre los campos
Aguilucho cenizo
Avutarda euroasiática
Avutarda euroasiática
Avutarda euroasiática
Avutarda euroasiática
Los busardos ratoneros volaban por encima de elllas, pegando chillidos y cazando ratones tirándose desde 4 metros de altura.
Busardo ratonero
Busardo ratonero
Seguimos el camino hasta llegar a un puente donde descansaban en un extremo tarabillas, lavanderas blancas y boyeras, gorriones morunos y molineros. Tras pasar el puente tres avutardas, dos de ellas hembras y al otro lado del camino una hembra bastante confiada.
Avutardas euroasiáticas
Avutarda euroasiática
Y así terminamos nuestra salida por Tierra de Campos.
Un saludo, Bruno.
Cuando yo era como tú, y de eso hace ya muchos años, las avutardas eran mucho más desconfiadas al ser uno de los mejores trofeos para los que se dedicaban a la caza.
ResponderEliminarUn día nos tienes que explicar como puedes diferenciar las hembras de los machos de tanto pájaro.
Gracias por esta nueva entrada, Rapaciño.
Muy fácil, las hembras son más esbeltas que los macho y si ves a los machos te resultará más fácil de identificarlas (sobretodo en época de celo). Fíjate en que el macho tiene más plumaje que la hembra. Supongo que por ese motivo está en peligro de extinción, porque aunque ahora haya 1.500 ejemlares censados en Palencia dentro de 50 años puedan extinguirse, al igual que el águila imperial o el buitre negro.
ResponderEliminarUn saludo, Bruno
Seguro que también has visto palomares y multitud de cigüeñas, pero claro eso es corriente en todos los sitios, sin embargo son lo más característico de Tierra de Campos. En verano, entre los campos de trigo segados, se ven perdices y codornices, bueno, seguro que en otras épocas también, pero mi recuerdo es ese.
ResponderEliminarHoy he visto una pareja de mirlos y los he podido distinguir por el color gracias a ti. Me doy cuenta que no sé nada de aves, tienes mucho que enseñarme. Me ha encantado saber que las hembras son más esbeltas y que los machos están en peligro de extinción por el plumaje...¿ lo he entendido bien? Besos, Bruno.
Por supuesto que he visto palomares, un montón. Y cigüeñas habría como 20 nidos en cada iglesia. Perdices también he visto, en la laguna de la Nava hay tres observatorios, cada uno en una parte distinta de la laguna. Para llegar al segundo observatorio tieness que dejar el coche en un parking que tiene vistas a los campos de cereal. Pues desde allí las vi. Por cierto, lo de los machos de avutarda creo que lo has entendido bien, lo único que no sólo los machos se cazaban, también las hembras. Un buen abrazo, Rapaz Salvaje.
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